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mermelada de calabaza

Receta de mermelada de calabaza casera

La receta de mermelada de calabaza se convierte, cada otoño, en un imprescindible de mi cocina. Esta estación nos agasaja con espléndidos y deliciosos frutos, y uno de mis favoritos es la calabaza. Estamos en la mejor época para consumirla y, si además de su delicioso sabor, destacamos sus incontables y saludables propiedades, nos faltarán ocasiones para saborearla en cualquiera de sus variantes. Su suave y dulce sabor les encanta a los más pequeños, constituyendo una fuente de magnesio, vitaminas y aminoácidos muy fácil de aportarles en su menú diario, en forma de papillas o cremas.

 

Y no sólo cremas, pues la calabaza tiene numerosas posibilidades culinarias. Una de mis favoritas es en forma de mermeladas. El delicioso sabor de la mermelada de calabaza sorprende hasta al más escéptico. En mi casa se ha convertido en una imprescindible en los desayunos. Además, las mermeladas son muy buenas conservas que pueden durarnos, bien selladas, durante meses. Así que, ¡manos a la obra, hagamos mermelada para todo un año!

 

Cómo elaborar la receta de mermelada de calabaza en pocos pasos

 

El primer paso para preparar la receta de mermelada de calabaza es reunir los ingredientes. Debéis prestar atención a que la calabaza seleccionada esté madura, y su corteza sea gruesa. Una corteza fina será indicador de que la calabaza aún no está en grado óptimo de madurabilidad.

 

Teniendo este dato en cuenta, debéis reunir los siguientes ingredientes (si quereis hacer más cantidad debéis aumentar proporcionalmente los mismos):

 

350 gramos de calabaza madura

100 gramos de azúcar

1 rama de canela

 

  1. Pelamos y cortamos la calabaza en dados de tamaño pequeño
  2. Ponemos la calabaza en un cazo y le añadimos el azúcar entre capa y capa, para que impregne bien la verdura.
  3. Dejamos reposar unos 10 minutos. Añadimos la rama de canela.
  4. Ponemos a fuego lento durante media hora
  5. Retiramos la rama de canela y pasamos por el pasapurés para conseguir la textura deseada
  6. Envasamos al vacío. Para ello, introduciremos la mermelada en tarros de cristal esterilizados, que cerraremos con fuerza y colocaremos boca abajo hasta que se enfríen.

 

¡Listo! Ya tenemos preparada nuestra propia mermelada de calabaza, ideal para acompañar nuestros otoñales desayunos.

 

Saludos, Sandra

 

Imagen: Freepik

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