La quinoa: beneficios y cómo cocinarla
Seguro que, de un tiempo a esta parte, estáis encontrándoos quinoa por todas partes. Y es que sus múltiples propiedades y su alto valor nutricional están haciendo de este pseudocereal un imprescindible en las cocinas.
¿Qué es exactamente la quinoa?. Pues bien, debemos saber que se trata, en realidad, de una semilla. Sin embargo, su modo de consumo se asemeja al del cereal. Por ello se dice de la quinoa que es un pseudocereal.
Y aunque su consumo nos parezca algo muy innovador y muy moderno, en realidad no lo es. Su origen, milenario, es andino. En Argentina, Colombia y Chile era un alimento básico.
Beneficios de la quinoa
Si hay algún motivo para consumir quinoa, es precisamente por su versatilidad en la cocina y por sus beneficios y grandes propiedades. Por ejemplo, es un alimento que tiene más propiedades que el arroz y otros cereales. Además, es rica en ácidos omega 3 y 6. Por si fuera poco, tiene un alto contenido en fibra, por lo que es muy útil para contrarrestar el estreñimiento.
No sólo eso. Está muy indicada para personas celiacas y/o diabéticas, dada su ausencia de gluten y su bajo índice glucémico. Igualmente, es muy recomendable para controlar el colesterol.
Y por si fuera poco, su versatilidad es increíble. La quinoa sirve para preparar multitud de recetas, ¡y no sólo saladas!. Así, desde guarniciones o deliciosas ensaladas, pasando por salteados o hamburguesas. ¡Incluso pasteles o como sustitutiva de la avena en el desayuno!
Cómo cocinarla
Si vuestro temor es no saber cómo enfrentaros a la quinoa, veréis que no tiene ningún misterio:
- En primer lugar, es muy importante hacer un lavado previo de las semillas, frotándolas con las manos bajo agua corriente. Es recomendable hacer esta operación sobre un tamiz, ya que las semillas son muy pequeñas y se pueden escurrir fácilmente entre los dedos. Este paso es fundamental para liberar a la quinoa de la saponina que la recubre y que le otorgaría un sabor amargo.
- A continuación, hervir la quinoa, bien sea en agua o en algún caldo para darle sabor, hasta que las semillas se abran (aproximadamente unos 20’).
Saludos, Sandra