Cómo eliminar el mal olor de la vajilla y cristalería
Mi vecina me comentaba el otro día que desconocía cómo eliminar el mal olor de la vajilla y cristalería de su hogar. A los dos días de confesarle mi método, subió a casa con un ramo de flores en agradecimiento.
Seguro que a vosotros también os ha pasado alguna vez que, al sacar los platos y la cristalería del lavavajillas, habéis notado que estaba todo impregnado de un desagradable olor que echa bastante para atrás. Por supuesto, no sólo ocurre con el lavavajillas, si laváis a mano también lo habréis experimentado.
Y es que si sois como yo, os pasaréis el día tratando de identificar de dónde vienen los malos olores de casa, y aplicando remedios para eliminarlos. No sé vosotros, pero necesito que mi hogar esté siempre perfectamente perfumado para sentirme agusto.
Olor a huevo
Ese mal olor que solemos identificar con el huevo seguro que os resulta familiar. Pues bien, si echáis la vista atrás, seguramente haya un elemento común: en alguno de esos platos se ha servido alguna comida con el huevo como ingrediente. Y habréis experimentado que, además, es un olor muy persistente y que, a pesar de los lavados, a veces cuesta mucho eliminar del todo.
Sin embargo, no siempre es el huevo el que está detrás de ese mal olor, muchas veces se debe a que vajilla y cubiertos no han sido correctamente lavados.
Cómo eliminar el mal olor de la vajilla y cristalería
El remedio para evitar que esto ocurra, o solucionarlo si ya ha pasado es bien sencillo: tras colocar los platos en el lavavajillas e introducir el producto que uséis en su cajetín correspondiente, espolvoread un poco de bicarbonato en la parte inferior del aparato. Cerradlo y activadlo con el programa que deseéis.
El resultado
Además de neutralizar los malos olores, el bicarbonato dejará impecables no sólo la cristalería y la vajilla, sino también sartenes y ollas que haya en el interior del lavavajillas.
Si laváis la loza a mano y habéis detectado ese mal olor en ella, podéis sumergirla en agua caliente con bicarbonato durante varios minutos antes de proceder a su lavado. El limón también es un poderoso neutralizador de olores, por lo que otra buena opción es frotar los platos con una bayeta impregnada en zumo de limón y luego aclarar con normalidad.
Otros métodos
Aunque estos trucos no los he probado, muchas personas me habéis escrito diciéndome vuestros remedios para eliminar el mal olor en la vajilla. Os los dejo aquí:
- Frotar platos, cristalería y cubiertos con café soluble. Y luego, lavar con normalidad.
- Este mismo método me lo habéis referido utilizando harina de garbanzos en vez de café.
- Surmergir toda la vajilla en agua con vinagre y dejar actuar unos minutos.
¿Conocéis más remedios para acabar con ese olor a huevo? Me encantará conocerlos.
Saludos, Sandra
Imagen: Pinterest